Es una ruta de dificulta baja – media, accesible para todas las personas que estén algo acostumbradas a andar por montaña. El sendero es muy pedregoso y hay una importante ascensión.
Tras más de 3 kilómetros de subida desde nuestro inicio por fin llegamos al Puerto de los Pilones (1.750 metros de altitud).
En este punto encontramos un quejigal de alta montaña con ejemplares muy antiguas y formas casi fantasmagóricas esculpidas por las condiciones meteorológicas de la zona. Este tipo de quejigo está en peligro de extinción. En la zona se aprecian bastantes árboles de repoblación.
Desde el Puerto de los Pilones 1.750 metros se obtienen unas espectaculares vistas panorámicas. Desde el mirador situado en este punto se pueden apreciar todas las cumbres de alrededor, divisando el pico Torrecilla a la izquierda y el cerro Alcazaba a la derecha.
Entre el área recreativa de los Quejigales y el Cortijo de las Navas tuvimos la gran suerte de encontrarnos con un grupo de cabras montesas que se dejaron fotografiar y posaron para nosotros.
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